En el segundo día de paro de labores, unidades antimotines de la Policía Nacional se presentaron al Complejo Hospitalario de la Caja de Seguro Social para impedir la protesta de los funcionarios.

No sólo reprimieron sino que, al igual que en las pasadas protestas de los indígenas, varios policías desenfundaron sus amas de reglamento para cobardemente apuntar contra los manifestantes.

Los trabajadores, apoyados por los gremios médicos y técnicos, exigen mejoras salariales, mejores condiciones de trabajo y el cumplimiento de acuerdos pasados con la administración.

El corrupto Directos de la CSS se ha negado al diálogo y la mediación de la Iglesia Católica.   Insiste en descontarle a los huelguistas y destituir funcionarios para imponer la política de privatización que viene impulsando, como parte de los grandes negociados, las coimas y licitaciones amañadas que fomenta con gastos suntuosos, mientras escasean los medicamentos, aumentan las bacterias nosocomiales, se deterioran los servicios médicos y mueren asegurados por negligencia.

¿Estos son los concesos que dice Martinelli construirá desde el Gobierno, luego de la Cita eucarística del pasado domingo'

Desde FRENADESO condenamos esta agresión y llamamos al pueblo a solidarizarse con los trabajadores en lucha.

Hoy, martes 15 de mayo, en la Iglesia Don Bosco, el Comité de Familiares y Pacientes por el Derecho a la Salud y la Vida (COFADESAVI) efectuarán una vigilia en la Iglesia Don Bosco a partir de las 4:00 p.m.

2:00 p.m. La Policía dispara perdigones contra manifestantes.

COMUNICADO DE FRENADESO

DEFENDAMOS EL DERECHO A LA SALUD Y EL DERECHO A ORGANIZACIÓN

Desde hace varias décadas, con la imposición de las medidas neoliberales, los diversos gobiernos han desarrolado una política de mermar la responsabilidad del Estado en proveer el acceso a los servicios de salud con calidad y calidez al pueblo panameño.

Toda una política de desabastecimiento del instrumental médico e insumos y material quirúrgico comprometiendo las cirugías, falta de médicamentos principalmente a los pacientes de enfermedades crónicas, falta de recursos humanos especializados para brindar el servicio, descuidos en los controles médicos originando cientos de muertes por envenenamiento masivo con dietilenglicol, falta de mantenimiento técnico a las instalaciones hospitalarias que, entre otras cosas, conlleva la muerte de decenas de personas a causa de bacterias nosocomiales. Se trata de crear las condiciones que justifiquen la privatización de la salud.

Es decir, la salud librada al mercado, donde el derecho a la salud es negado en la medida que la salud deja de ser un derecho y se convierte en mercancía, y solo quién posee ingresos puede tener acceso a ella.

A pesar del rechazo de la población a esta política privatizadora, en cualquiera de sus manifestaciones (externalidades, compra de servicios, concesiones administrativas, privatización de fondos), los últimos gobiernos no han desistido de sus planes de privatizar la salud, quieren hacer de este servicio y derecho humano un negocio más de las grandes empresas nacionales y transnacionales. En el caso de Martinelli, la lleva al extremo a través del papel que ha jugado su socio Guillermo Sáez-Llorenz, bajo el mecanismo de compras directas, licitaciones amañadas y el proyecto de Asociación Pública Privada (APP), esquema rechazado en las calles por la población panameña el año pasado, pero que a pesar de no haber sido aprobada, la CSS la utiliza en más de 8 proyectos.

Igualmente se comprometen millones de dólares en proyectos hospitalarios, que terminan siendo infraestructuras carentes de equipamiento y recursos humanos para su funcionamiento, revelando con ello que se trata de negociados a costillas de las aspiraciones de la población que clama por el derecho a las salud.

Ello, explica son los escándalos en que la Administración de la CSS se ha visto envuelto, dado el favoritismo que prevalece para beneficiar a socios y allegados del Director de la CSS y el Secretario General de la misma.

Esta situación, que ha sido reiteradamente denunciada por la población y por los funcionarios de la institución (administrativos, médicos y personal de salud), ha generado por parte de las autoridades de salud, el despido de trabajadores, así como la persecusión hacia la dirigencia gremial.

En su prepotencia, Sáez Lorenz, hostiga el accionar gremial, desconoce los acuerso reivindicativos que los diversos gremios de la CSS han alcanzado producto de sus luchas.

Esta situación de persecusión, que ha sido denunciada ante instancias internacionales, provocó que la OIT abriera expediente (Caso 29-21), por incumplimiento de las libertades y derechos gremiales, derechos de los cuales Panamá es signataria.

Hoy el sector de la salud se encuentra en lucha, para que se respete su derecho de escala salarial, se suspenda los procesos privatizadores de la salud, se atienda los requerimientos de instrumentos, insumos y recursos humanos para la adecuda atención de la población y se respete su derecho a la organización como mecanismo legitimo de organización.

En el segundo día de paro de labores, unidades antimotines de la Policía Nacional se presentaron al Complejo Hospitalario de la Caja de Seguro Social para impedir la protesta de los funcionarios. Esta es la respuesta de un gobierno autoritario.

Sobre estos hechos, FRENADESO se solidariza con la lucha de los trabajadores de la salud; llama al pueblo a defender el derecho a la salud pública, gratuita, con calidad y calidez. Expresamos nuestra determinación de luchar por el derecho a organizarnos, la cual nos asiste a todos los trabajadores.

POR EL RESPETO AL DERECHO A LA SALUD

NO A LA PRIVATIZACIÓN DE LA SALUD

RESPETO A LAS ORGANIZACIONES GREMIALES

ABAJO LOS DESPIDOS Y LA PERSECUSIÓN EN EL SECTOR SALUD

SIN LUCHAS NO HAY VICTORIAS

Panamá, 15 de mayo de 2014.