La partidocracia cada cinco años toca a las puertas del pueblo y promete ser el redentor. Jura que de llegar al Gobierno los problemas de las grandes mayorías desposeídas de la población serán resueltos, que se acabará con la corrupción. Campaña electoral tras campaña, utiliza a los pobres en sus discursos electorales. Toda la partidocracia promete llevar al país al ‘primer mundo ', categoría que por cierto ya no es válida.

Los cinco partidos tradicionales (PRD, DC, Molirena, PP y Panameñista) han estado en la conducción del Gobierno, ninguno ha resuelto los problemas fundamentales de vida, no han resuelto los problemas de corrupción e impunidad en la esfera pública. Todos han ejecutado el mismo modelo económico neoliberal. Igualmente, constituyen Gabinetes con familiares, socios, copartidarios, inversionistas de sus campañas.

Toda la partidocracia en el Gobierno corre a incrementar el número de afiliados a sus partidos, a través del clientelismo político u obligando al funcionariado a matricularse en el partido en el Gobierno, amenazando con quitar o prometiendo beneficios a la población que son financiados con nuestros impuestos, pero que además son derechos. No conforme con ello, fomenta el transfuguismo, establece pactos de gobernabilidad, y cada vez es más evidente la incorporación de personeros de la llamada ‘sociedad civil '; queda demostrado cómo acomodaron a los suyos en puestos claves para garantizar sus intereses personales y empresariales.

Siempre hemos dicho que los grandes empresarios son simultáneamente ‘oposición ' y Gobierno, con lo cual sus intereses económicos están plenamente protegidos, si lo dudan solo basta mirar los nombres del patio que se desprenden de lo tramitado por Mossack Fonseca.

En este sentido, a pocos días de iniciar el tercer periodo de Juan Carlos Varela, mucho se pregunta sobre el balance de su gestión y sobre la necesidad de cambios en el Gabinete.

Sobre el balance de su gestión guberna mental, podemos mencionar un saldo positivo para los 115 ultramillonarios, pues se sigue ejecutando una política pública que los tiene como sus beneficiarios. Para las grandes mayorías la gestión es negativa: aumenta el desempleo, aumentan los precios de la canasta básica, sigue el deterioro ambiental, el derroche energético, aumenta la deuda pública, aumenta la inseguridad ciudadana, sigue el deterioro de los sectores productivos en especial el agro, el sistema tributario sigue siendo regresivo, continúan los gastos innecesarios, la corrupción y los negociados. Se profundizan los problemas en educación, salud, acceso al agua potable, seguridad social; todos ellos amenazados con privatizaciones. Es obvio, nunca se pretendió dar respuesta a las demandas sociales insatisfechas de la población.

En cuanto al Gabinete, tal como expresamos en junio de 2014 es un gabinete de familia y socios empresariales, con lo cual garantizan los intereses económicos de los grupos de poder que desde la vida republicana definen presidentes. Es un gabinete neoliberal, que en diversos momentos ha impuesto medidas económicas lesivas a los sectores que viven en pobreza y pobreza extrema, así como a las capas medias y micros y pequeños productores.

Frente a posibles cambios de ministros y directores, advertimos que esto solo constituye cambio de rostros, las medidas antipopulares, el tomar el Estado como fuente de sus negocios, la corrupción y el nepotismo continuarán.

Romper con el engaño, con este accionar que niega democracia, es una tarea urgente de los sectores democráticos y éticos del país.

Solo un Gobierno nuevo y decente, enfocado en los mejores intereses nacionales y sociales, alejado de la podredumbre moral en que han caído las instituciones del Estado podrá darnos verdadera justicia y acabar con la impunidad que impera en el país, por ello construimos nuestra propia alternativa, Frente Amplio por la Democracia (FAD). Tarea que no es fácil, pues la partidocracia nos somete a condiciones que ninguno de los partidos constituidos a la fecha han tenido que librar: número de adherentes, libros estacionarios restringidos a cuatro meses, además cuentan con el financiamiento público.

SECRETARIO GENERAL DE CONUSI-FRENADESO.