Estamos viviendo una grave crisis institucional en la que la corrupción y la impunidad se han apoderado de las instituciones que deben estar al servicio del pueblo. Se violentan el derecho a la vida y la dignidad de los ciudadanos. La desigualdad y la exclusión de las grandes mayorías producto de las políticas neoliberales en un capitalismo en quiebra están afectando fundamentalmente a los jóvenes. Más de 250,000 jóvenes entre 19 y 29 años no tiene trabajo formal o no trabaja y no tiene oportunidad de estudiar.  La mayoría son mujeres.  Los jóvenes del campo y de los territorios de los pueblos originarios son expulsados hacia la ciudad por la voracidad del poder económico. La mayoría de los jóvenes que trabajan lo hacen en condiciones precarias. La carencia de políticas de salud los hace entre los más vulnerables de los panameños siendo víctimas de enfermedades infectocontagiosas como el VIH y la tuberculosis.

Por eso saludamos a esa juventud luchadora que busca mejores condiciones de vida en la ciudad, en el campo y en los territorios de los pueblos originarios.

El Frente Amplio por la Democracia, de la mano del movimiento social organizado, construye un proyecto político en el que  la prioridad es que  todos los derechos del pueblo sean garantizados: educación, salud, vivienda, transporte, trabajo decente. 

A esa juventud luchadora que ya hace parte del FAD, les invitamos a reforzar la construcción de la organización en los barrios, escuelas, centros de trabajo, recogiendo la aspiración que hoy la mafiocracia arrebata con las políticas neoliberales. A organizarse en la cultura, el deporte, la política. Exigir su derecho a participar en la toma de decisiones, en los temas que le atañen directamente como juventud y en los temas relevantes de la sociedad.

FRENTE AMPLIO POR LA DEMOCRACIA