Desde la reunión con el Presidente Cortizo el 17 de marzo donde hicimos una serie de propuestas frente a la pandemia del coronavirus, incluida un bono solidario que satisficiera la canasta básica familiar, pasando por las reuniones de la Comisión Tripartita donde se establecieron los comités de higiene en los proyectos y se adoptaron otras medidas para proteger a los trabajadores como darle vacaciones al personal de riesgo como los mayores de 60 años, mujeres embarazadas, pacientes de enfermedades crónicas, hasta la reunión del 21 de marzo con la Cámara de Panameñas de la Construcción (CAPAC), donde se pudo concertar que los trabajadores cobraran los días trabajados y el XIII mes, siendo el único acuerdo de esta naturaleza que se dio a nivel de todos los sectores laborales, el SUNTRACS ha demostrado su interés de encontrar, a través de la negociación y del diálogo, respuestas concretas a la difícil situación de los trabajadores.

Tal como habíamos acordado, este sábado 18 de abril, a 25 días de la cuarentena, planteamos a la CAPAC, con la presencia de la ministra de Trabajo, lo siguiente:

Reiteramos un bono de 500 balboas mensuales para los trabajadores, que satisfaga el costo de la canasta básica familiar el cual puede constituirse de:

    El pago de 15 días de salarios prorrogables a 30 días.
    El pago de los días nacionales: el pasado Viernes Santo y el futuro Primero de Mayo, Día del Trabajador.
    Adelanto del pago de las prestaciones sociales o préstamos sustentados con éstas.
    El pago de los beneficios estipulados en el artículo 5 del Decreto Ejecutivo 81 de 20 de marzo de 2020, denominado bono solidario, que no han llegado a los trabajadores los correspondientes al mes de abril.

Solicitamos a la CAPAC que pusieran a disposición sus plataformas digitales que utilizan para pagar las planillas, para que a través de ellas poder entregar una ayuda especial extraordinaria del SUNTRACS por el COVID-19 a los trabajadores cuyos contratos están suspendidos. Esta fórmula ya se aplicó en la huelga de 2018 con algunas empresas para hacer llegar el subsidio de huelga a los obreros y la consideramos la única con mayores posibilidades y seguridad dada la situación actual. Algunas empresas con mayor conciencia de la situación ya han expresado su disposición de brindar sus plataformas.

Todas estas propuestas fueron rechazadas por la CAPAC.

Además, insistimos en la moratoria en el pago de préstamos y créditos de bancos y casas comerciales y el congelamiento de intereses.

Y, por último, planteamos una serie de alternativas para que las empresas tuvieran la liquidez para afrontar el pago de salarios y prestaciones a los trabajadores, como incentivos fiscales, préstamos blandos, factoring a través del Banco Nacional y la Caja de Ahorros, de forma tal que no haya excusas frente a una situación que se ha convertido para el pueblo en vida o muerte.

Ni algunos empresarios ni la representante del Gobierno atendieron estos planteamientos, demostrando una tota falta de sensibilidad social y de solidaridad con los trabajadores..

Esta intransigencia se combina con una campaña sucia que se viene impulsando en las redes y medios de comunicación contra SUNTRACS y las organizaciones que alzamos nuestra voz crítica frente al manejo de la crisis, ante la serie de contradicciones y falsedades en la información proveniente de las autoridades y la no entrega de los bonos y bolsas de comida como parte de la prometida ayuda gubernamental que, al no

Esta Campaña se une a los ataques y a los intentos de los grandes medios de comunicación y voceros del Gobierno de achacarle la responsabilidad en la agudización de la crisis, al pueblo desesperado que se ve obligado a salir de sus casas en busca de comida.

Ante esta situación expresamos nuestra voluntad de seguir reuniéndonos esta semana con la CAPAC y los representantes del Ministerio de Trabajo en busca de soluciones reales.

Señalamos a la opinión pública que, de los fondos que dispone el Gobierno, entre estos los casi 4 mil millones de dólares en los últimos préstamos y colocación de bonos que pagará el pueblo panameño, sumado a las inmensas riquezas acumuladas por los grandes millonarios mediante el modelo económico que por décadas los ha bonificado, incluidas las grandes empresas constructoras, hay suficientes recursos para entregarle a cada familia panameña que lo requiere un bono de 500 balboas mensuales (y no los supuestos 80 balboas que no llegan ni resuelven), los cuales en dos meses, no superarían los mil millones de balboas. Con ello, más la moratoria que el pueblo reclama, se daría tranquilidad a los hogares humildes, para que se alimenten sanamente y resistir así la pandemia y no que coman dos veces al día o uno sí y otro no, cómo de manera absurda han propuesto ciertos personajes en medios de comunicación y redes sociales.

Exigimos a los empresarios y el gobierno nacional que presenten propuestas racionales, que junto a las presentadas por el SUNTRACS, contribuyan a paliar la difícil situación económica, social y sanitaria que viven los obreros del sector construcción así como el resto del pueblo trabajador panameño.

Llamamos a los obreros de la construcción a estar atentos frente a los llamados de su sindicato y en disposición de protestar en las calles junto al pueblo que reclama sus derechos. Somos conscientes de la situación de emergencia, no deseamos romper el cerco sanitario, lo que queremos es romper el cerco de hambre que nos han impuesto. El pueblo trabajador no puede cargar esta crisis, como pretenden los grandes millonarios que buscan sacar provecho de ella para enriquecerse aún más.

Panamá, 19 de abril de 2020.